Relacionado con:
– Auto-regulación, fundamento del desarrollo: Regulación emocional
– Auto-regulación, fundamento del desarrollo: Regulación del comportamiento
– Área del desarrollo 3, desarrollo del lenguaje, la comunicación y la lectoescritura: La comunicación social
– Planteamientos del aprendizaje: Confianza y toma de riesgos
Las experiencias y relaciones positivas con los adultos consiguen que los niños terminen estableciendo relaciones especiales y significativas con otros compañeros de su edad. Los interacciones y comportamientos con los adultos les ayudan a desarrollar las habilidades sociales y emocionales necesarias para conseguirlo.
Cuando los niños empiezan a ser conscientes de sí mismos demuestran un interés hacia los otros niños simplemente observándolos o tocándolos. La observación y el interés conducen por sí mismos a la imitación y a las interacciones sencillas, como pasar un juguete a otro niño o hacer rodar una pelota hacia él.
Los niños de dos años realizan interacciones e intercambios sociales más complejos durante el juego mientras forman conexiones sociales. En esta edad actúan principalmente según sus impulsos y tienen dificultad para controlar las emociones y los comportamientos. Pero empiezan a aprender las conductas sociales más apropiadas mediante los indicios y la información que encuentran en los modelos que les informan sus progenitores.
Las relaciones con los compañeros tienen también un papel importante, tanto en el desarrollo del concepto del yo del pequeño como en la aparición de la empatía. La capacidad para participar y jugar de forma positiva con otros niños dependerá de la evolución de la conciencia sobre los sentimientos y puntos de vista ajenos. Mientras crecen, los niños aprenden una conciencia básica de lo que otros están expresando. Pero esta conciencia va creciendo para formar la comprensión y el comportamiento sensible hacia los sentimientos de los demás. Estas interacciones y experiencias exitosas con otros ayudan a los niños a desarrollar la confianza en sí mismos y la autoestima. Esto es muy importante porque apoya la capacidad de los pequeños para formar y mantener relaciones significativas con sus compañeros.
Las etapas del juego de bebés y niños pequeños
El juego es el trabajo de los niños, una herramienta que les permite explorar y aprender del mundo que les rodea. Mientras los niños van alcanzando hitos en el desarrollo, el estilo de jugar va evolucionando porque refleja sus capacidades crecientes. Los bebés pequeños juegan de forma independiente al explorar objetos y juguetes a solas. El juego paralelo empieza después del primer cumpleaños y se caracteriza por actividades al lado de otro niño con objetos y juguetes similares, pero muy raramente se ve la interacción entre los pequeños. Entre los niños de un año y medio a tres años el juego asociativo es más común, aunque realizan actividades parecidas con muy poca organización y sin reglas. Todos estos tipos diferentes de interacción en el juego consiguen el desarrollo de habilidades sociales como las de respetar límites, turnarse, compartir y esperar. Todas ellas son importantes para establecer relaciones sanas con sus compañeros, cuando empiecen a jugar más adelante de forma cooperativa y con reglas en los años preescolares.
0 a 9 meses
Los niños empiezan a relacionarse con su entorno y con las personas que están a su alrededor. Emerge un interés con otros niños pequeños.
Indicios
- El niño demuestra un esfuerzo por relacionarse y participar: mira a los ojos de la madre, arrulla, sonríe
- Observa a otros niños cómo juegan cuando va al parque
- Muestra interés por otros compañeros, tanto conocidos como desconocidos
- Llora cuando escucha el llanto de otro niño
- Extiende la mano para tocar a otro niño
- Intenta imitar acciones: da golpes en el suelo con un juguete
Estrategias
- Responder positivamente a los sonidos vocales del niño con palabras y expresiones del rostro
- Tomarlo en brazos, abrazarlo, sonreírle y relacionarse físicamente con él
- Imitar los sonidos y acciones del niño de manera positiva
- Leer y jugar con el niño a menudo. Si es posible usar libros que reflejan la cultura del hogar
- Participar con el niño en la exploración y el juego. Seguir al niño a los sitios donde quiere ir
7 a 18 meses
Los niños empiezan a observar e imitar los comportamientos de otros niños.
Indicios
- Muestra que le interesa otro niño aproximándose: se le acerca rodando en el suelo, gateando o caminando
- Imita las acciones de otro niño: haciendo rodar un coche
- Participa en juegos sencillo y recíprocos que no tienen reglas
- Empieza a jugar paralelo más cerca de otros niños, pero sin intentar ninguna interacción
Estrategias
- Proveer oportunidades para que el niño pueda jugar y relacionarse con otros semejantes
- Dar un modelo de interacciones positivas al jugar y pasar tiempo con el niño
- Proveer actividades que pueden realizarse con grupos, como canciones, actividades de movimiento o lectura de cuentos
- Proveer diversos juguetes para que los niños pueden explorarlos y jugar con ellos
16 a 24 meses
Mientras maduran el juego y la comunicación, los niños empiezan a buscar interacciones con compañeros.
Indicios
- El niño hace gestos para comunicar su deseo de jugar cerca de un compañero
- Demuestra entusiasmo cuando está con otros niños
- Expresa frustración cuando otro niño le quita algo que le interesa: un juguete
- Empieza a participar en interacciones recíprocas sencillas: hace rodar una pelota entre sí mismo y otro niño
- Demuestra una preferencia por el juego en paralelo: juega al lado de otros niños con juguetes similares con muy poca o ninguna interacción
Estrategias
- Reconocer y responder atentamente ante la comunicación verbal y no verbal del niño
- Crear un momento especial cuando dos o tres niños leen un libro con un padre o una madre
- Reconocer comportamientos de compartir y mostrar consideración por el estado de ánimo de otro compañero: un niño da toques suaves a otro que está alterado o le pasa un juguete para que se calme
- Proveer más de un ejemplar del mismo juguete para que el niño y sus compañeros puedan jugar con ellos sin molestarse por la coincidencia en el deseo del juguete
- Usar la distracción y la redirección para limitar los conflictos entre niños
21 a 36 meses
Los niños participan con los compañeros y continúan interacciones, usando las habilidades sociales y de juego que están desarrollando.
Indicios
- Demuestra que prefiere a ciertos compañeros en particular y comienza a desarrollar relaciones de amistad
- Se frustra con los compañeros: grita “no” si otro niño intenta interferir en algo que está haciendo
- Participa en compartir cosas cuando se le indica que lo haga
- Se comunica con otros niños en diversas situaciones: habla con un compañero durante la merienda o le pasa un libro
- Empieza a jugar de forma más compleja con dos o tres niños
Estrategias
- Crear grupos pequeños tutorizados por algún padre o madre, para compartir algo de tiempo de calidad ellos
- Proveer juguetes con los que dos o más niños pueden jugar a la vez
- Proveer actividades que animan el compartir y también limitan el riesgo de frustración: actividades plásticas, deportivas o de actuación